Medicamentos orales

La cirugía ha intentado separar las raíces nerviosas, pero esto no ha sido eficaz, además, este enfoque sólo tiene en cuenta un problema anatómico, pero en la médula espinal tenemos un conglomerado de neurorreceptores que ya se encuentran funcionando mal y el dolor no desaparecerá sino que puede empeorar. He revisado los casos de pacientes sometidos a este procedimiento pero el dolor no mejoró. Algunos estuvieron bien por unos pocos meses después el agrupamiento de las raíces nerviosas se observó de nuevo.

Medicamentos orales

El dolor crónico altera la función del asta posterior y el sistema de receptores y transmisores, que siguen recibiendo señales de alteración, por lo tanto, es importante romper el ciclo de dolor. Si no se recibe tratamiento para el dolor este empieza a aumentar y lentamente se expande a otras áreas, esto se llama el fenómeno de wind-up. También discutí la teoría de la puerta donde un dolor grande bloquea un poco dolor.

Después de recibir altas señales de la corriente eléctrica esta red de receptores está funcionando incorrectamente y el narcótico trabaja porque bloquea la transmisión del dolor pero tiene el efecto secundario de la tolerancia. Además, los pacientes con medicaciones con opiáceos también desarrollan hiperalgia: los opiáceos producen más sensibilidad.

Considerando que la enfermedad no ha aumentado de manera significativa el paciente percibe que sus síntomas son peores, porque el paciente se ha hecho más sensible (hiperalgesia), en otras palabras, su umbral del dolor se ha reducido. Entonces, la hiperalgia sucede cuando alguien se lesiona y después se comienza con dosis pesadas de narcóticos en el plazo de 3 meses. Por lo tanto, es importante utilizar otros medicamentos y reducir la dosis de opiáceos, así como otros medicamentos suplementarios. La Gabapentina (Neurontin) controla la hipersensibilidad. En la esencia el paciente tiene 'convulsiones' como señales de los nervios periféricos; estas son señales eléctricas anormales en los nervios que llegan a la médula espinal. Estoy convencido de que los medicamentos opiáceos no son la forma apropiada de tratar el dolor crónico no canceroso neuropático, sobre todo porque los opiáceos son menos efectivos para este tipo de dolor y todos los pacientes desarrollarán dependencia (taquifilaxia). No soy crítico contra opiáceo, puesto que trato a pacientes con el opiáceo, pero utilizo programas reducidos de la droga. El programa de estupefacientes II como demerol, morfina, oxicodona, fentanilo e hidromorfona alivian el dolor pero tienen una incidencia mayor de desarrollar taquifilaxia. También puede producir cambios de conducta y la memoria de los pacientes puede estar afectada también. El programa de medicamentos III como la hidrocodona o propoxifeno, aunque tienen una potencia más débil, producen menos dependencia.

Del Dr Antonio Aldrete: La evidencia revelada